Cerveza de trigo originaria de Alemania, importada en Argentina por InBev (Quilmes), propietaria de la marca desde 2004. La botella de cerveza Franziskaner Hefe-Weissbier destaca por su etiqueta dorada y plateada, que en la versión importada viene rematada por un protector de papel dorado para la parte superior que termina recubriendo la tapa. Otro detalle característico el monje franciscano de la etiqueta, al que podemos observar bebiendo felizmente una jarra de cerveza.
Al servirla, en el vaso se presenta una cerveza ambarina turbia. La espuma es abundante, espesa y duradera, de un blanco amarillento.
En un primer trago de Franziskaner cuando usamos el olfato notamos notas un marcado carácter floral y frutado. Es una cerveza muy aromática, así que no debemos dejar de disfrutar de su olor.
El primer trago de cerveza nos desvela una entrada intensa que comienza con un frutado para luego dejar paso a mucho cuerpo, intenso sabor y con un toque de acidez muy suave. Es bastante cremosa. Finalmente decir que tiene una graduación alcohólica de 5% vol.
